sábado, 1 de agosto de 2009

Aprender a distinguir entre una sonrisa falsa y una verdadera es dificil.
Pero es aún más dificil tratar de sonreír cuando no podés.
Y es más fácil construir una coraza que arriesgarse a ser lastimado.
Y es más fácil apuntar con un dedo que dar una mano.
Y es más fácil quedarse en el suelo que volverse a levantar.
Y es más fácil echarle la culpa al otro que autocriticarse.
Y es más fácil olvidar que recordar.
Y es más fácil dar excusas que razones.
Y es más fácil ser un niño eterno que madurar.
Es más fácil esconderse que exponerse.
Es más fácil mentir que decir la verdad.
Es más fácil resignarse que seguir intentando.
Es más fácil pedir perdón que darse cuenta de lo hecho.
Es más fácil ser uno más que ser vos mismo.
Es más fácil decir que no se puede que intentar.
Es más fácil delegar que hacerse cargo.
Es más fácil esperar que ir a buscar.
Es más fácil vivir en una burbuja que asumir la realidad.
Es más fácil pedir que dar.

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